Difícil hacer coincidir en un mismo día tanto,
tan variado y diferente, tan hermoso y opuesto.
Adrenalina a desbordar, con paz y serenidad. Larga y tensa espera con la incertidumbre como destino, todo ello sustentado en la experiencia, saber hacer y fe; con la velocidad de reacción ante la acción.
Adrenalina a desbordar, con paz y serenidad. Larga y tensa espera con la incertidumbre como destino, todo ello sustentado en la experiencia, saber hacer y fe; con la velocidad de reacción ante la acción.
La certidumbre de
dejarte llevar y saber hacer mientras disfrutas, una vez compruebas que acertaste;
es la suma que da el trabajo previo bien hecho al preparar la jornada, con la
experiencia adquirida con los años y la siempre necesaria dosis de suerte,
puesta en juego por el destino y la atmosfera.
Así de complejo, denso
y hermoso, se podría resumir este gran día de caza meteorológica, un largo día
que comienza por la mañana en un rincón y termina bien metida la noche lejos de
donde se inició todo.
Y estrenar el blog,
con este reportaje, es una auténtica puesta de intenciones, y en sí mismo
una grata sorpresa del destino.
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